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Impulsividad en el aula. ¿Cómo se detecta? ¿Cómo se gestiona?

Impulsividad en el aula. ¿Cómo se detecta? ¿Cómo se gestiona?

Este es mi primer artículo en Justifica tu respuesta relacionado con la impulsividad. Un tipo de comportamiento que se da a diario en las aulas con determinados alumnos y que no siempre sabemos gestionar debidamente.

Es por eso que este artículo tiene la intención de dar unas pautas muy concretas para entender qué es el comportamiento impulsivo, cómo se manifiesta en las aulas y de qué manera puede gestionarse desde una perspectiva pedagógica.

Sin más demora, zarpamos…

¿Qué entendemos por impulsividad?

Este artículo no hubiera sido posible sin la lectura del libro titulado La inteligencia que aprende escrito a cuatro manos por José Antonio Marina y Carmen Pellicer. En este libro se da a conocer cuáles son las principales funciones ejecutivas entre las que encontramos, cómo no, el control de la impulsividad.

En su libro Marina y Pellicer afirman que la impulsividad es:

  • Una tendencia a actuar demasiado rápido, de manera irreflexiva o desordenada.
  • Una tendencia a buscar la gratificación inmediata, lo que complica el hecho de proponerse metas a medio o largo plazo.
  • Una tendencia a no poder impedir determinadas acciones automáticas.

Porque la impulsividad ha sido un aspecto que ha preocupado a no pocos educadores. De hecho, la propia María Montessori incide en la importancia de aprender la contención para descubrir nuestra verdadera interioridad.

De hecho, un niño desde su infancia aprende a:

1. A esperar una respuesta en lugar de de exigirla al instante

2. A hacer algo.

3. A reflexionar.

4. A tener voluntad.

Padres y madres enseñan a sus hijos a inhibir sus impulsos a través del lenguaje. Y en ese control de la impulsividad se dan dos etapas: aprender y conseguir que obedezca.

  • Conseguir obedecer
  • Precipitación en las tareas, pero sin lograr terminarlas
  • Demanda continua de la atención de un adulto
  • Incapacidad de aplazar la recompensa
  • Irritabilidad y humor variable
  • Desorganización
  • Propensión a la agresión y al desafío
  • Poca memoria a corto plazo
  • Dificultad a la hora de seguir unas instrucciones
  • Preguntar lo que se acaba de decir
  • Momentos de ausencia y desconexión
  • Propensión a proferir comentarios inadecuados
  • Dificultad para estar sentados
  • Poca focalizacicón, les cuesta hacer una sola acción a la vez
  • Poca paciencia y autocontrol

Cómo se manifiesta la impulsividad en las aulas.

Seguro que ahora que acabas de leer estas características estarás pensando en algún alumno de tu clase. Es más, seguro que muchos de nosotros cometemos el error de culpabilizar a ese alumno por su comportamiento. Y culpabilizando no se mejora una situación, todo lo contrario, tiende a empeorar.

Es por eso que como docentes nuestro mayor desafío, en palabras de Marina y Pellicer, es:

“Mantener el equilibrio entre el control de la impulsividad y la tendencia a la pasividad en el aprendizaje es tu desafío”.

¿Y cómo debemos afrontar este desafío? Marina y Pellicer proponen once actuaciones en su libro, de las que destacaría estas tres:

  • Refrenar la respuesta natural predominante
  • Buscar alternativas aceptables
  • Convertir en hábito el patrón de respuesta correcta

A partir de aquí, veamos cuáles son algunos factores que ayudan a controlar la impulsividad en el aula:

  • Poner límites explícitos y visibles. Esto afecta tanto al comportamiento en el aula como a los procedimientos que realiza en la misma.
  • Proponer tareas que impliquen para el alumno un alto grado de motivación. Sobre cómo motivar a tus alumnos te recomiendo la lectura del artículo 11 Claves para enseñar motivación en las aulas.
  • Tener muy en cuenta el espacio y distribución del aula e insistir en el orden.
  • Pautar tiempos de descanso.
  • Pautar de forma muy clara las tareas. No dar más de una instrucción a la vez. Se recomienda dar las instrucciones de cualquier tarea por escrito. en mi caso utilizo la pizarra digital.
  • Recompensar la tarea.
  • Pautar un tiempo para que el alumno exprese cómo se está portando y cómo ha realizado las tareas en el aula.
  • Anticiparse a la necesidad de demanda.
  • Dar órdenes o instrucciones contradictorias o ambiguas, sobre todo en una misma lección lectiva.
  • Abusar de las tareas mecánicas o repetitivas.
  • Mostrar indiferencia ante un logro, sobre todo, cuando este no es pequeño. Sobre cómo responder ante el logro de un alumno te recomiendo la lectura del artículo 4 Maneras de responder ante el logro de un alumno.
  • Desorden tanto en la distribución del aula como en la ejecución de las tareas.

¿Qué factores que promueven la impulsividad deberían eliminarse en el aula?

Otras estrategias que ayudan a controlar y gestionar la conflictividad en el aula.

Además de las actuaciones que acabo de indicar, existen otras estrategias efectivas que ayudan mejorar y modelar la impulsividad y que giran en torno a tres grandes ejes: entornomodelado y desafío. Dado que son muchas las actuaciones que se pueden llevar a cabo en estos tres ejes, seleccionaré aquellas que más me han llamado la atención del libro de Marina y Pellicer. Son estas:

1. Estrategias de impulsividad relacionada con el entorno.

  • Exponer claramente la recompensa antes que el logro.
  • Colocar a los alumno impulsivos en un lugar que sea visible en todo momento para el docente.
  • Dar responsabilidades específicas y fáciles de llevar a cabo.

2. Estrategias de impulsividad relacionadas con el  modelado o formación y consolidación de hábitos.

  • Elogiar inmediatamente el logro.
  • Identificar situaciones de calma y ayudar a reconocerlas y distinguirlas.
  • Hacer que el alumno verbalice los pasos de una determinada tarea.
  • Generar situaciones de cooperación con otros compañeros de clase.

3. Estrategias de impulsividad relacionadas con el desafío.

  • Pedir pequeños favores que hagan de forma gratuita y que generen complicidad con el docente.
  • Ir posponiendo paulatinamente la recompensa en el tiempo para que incremente su control y aprenda a ser más paciente.
  • Eliminar paulatinamente recompensar de carácter material.

La impulsividad como desafío en el aula. A modo de conclusión.

Si algo he aprendido del libro de Marina y Pellicer es que no sólo es posible detectar la impulsividad de un alumno en el aula, sino que también se puede trabajar de manera consciente y de una forma programada para poder así reconducirla.

Conseguir que un alumno impulsivo escuche con atención, piense previamente en las consecuencias de lo que va a hacer o a decir, reflexione sobre lo que hace o mantenga la calma ante una situación imprevista es, sin duda, todo un reto para cualquier docente. De ahí que espero que estas pautas os sirvan, cuanto menos, como punto de partida para el correcto desarrollo personal del alumno y una buena convivencia en el aula.

Fuente del artículoLa inteligencia que aprende, de José Antonio Marina y Carmen Pellicer.

 

DOCENTE AQUI TIENES 25 MANERAS DIFERENTES DE EVALUAR A TUS ALUMNOS

DOCENTE AQUI TIENES 25 MANERAS

DIFERENTES DE EVALUAR A TUS

ALUMNOS

Los exámenes, las actividades y los trabajos escritos han sido las formas tradicionales de evaluar a los alumnos. Sin embargo, hay muchas maneras de que los estudiantes demuestren lo que saben: un mural, una obra de teatro, un debate, un programa de radio, un video de animación…

Las nuevas tecnologías facilitan a los alumnos el desarrollo de estas y otras muchas creaciones, algunas de ellas antes impensables en el aula. Te presentamos 25 productos educativos con los que tus alumnos pueden mostrar lo que han aprendido y algunas herramientas 2.0 para elaborarlos.

VEINTICINCO FORMAS DE MOSTRAR LO APRENDIDO

1. Presentación.

Es una de las herramientas más útiles para que tus alumnos expliquen lo que saben y lo compartan con el resto de los compañeros. Prezi https://prezi.com/puede ayudarles a que sean más dinámicas e interactivas.

2. Folleto digital.

Condensar la información sobre un tema en un folleto puede servirles para sintetizar lo aprendido. Para diseñarlo pueden usar Issuu http://issuu.com/.

3. Revista o diario escolar.

Mediante su creación los alumnos pueden mostrar cómo se planifican, organizan y desarrollan un determinado tema, lo escriben, ilustran, diseñan… Con herramientas como Lucid Press o Joomag les será más fácil.

4. Ensayo.

Ideal para que sinteticen, estructuren y asimilen los contenidos aprendidos.

 

5. Discurso.

Escribir y pronunciar un discurso les sirve para desarrollar las habilidades comunicativas y de expresión, a la vez que muestran lo que saben.

6. Debate.

Los alumnos pueden adoptar distintos roles y apoyarse en sus conocimientos para argumentar frente a sus contrincantes.

7. Círculo literario.

 Participar en una actividad de este tipo fomentará la lectura entre tus alumnos y hará que se conviertan en críticos literarios, analicen y comenten las obras leídas, lo que más les ha gustado o disgustado, y hasta investiguen para saber más sobre ellas y exponerlo a sus compañeros.

8. Experimento.

Otra idea para asimilar los conocimientos es explicarlos a través de un experimento, ya que de este modo resulta más fácil explicar los conceptos más complejos. Pueden encontrar inspiración en Sick Science!Experimentos caseros y Full Experimentos.

 

 

9. Ilustración.

Muy útil para memorizar y plasmar las distintas partes de los seres vivos, del cuerpo humano, de edificios importantes o característicos, escenas de la vida social de cada época… Pueden incluir anotaciones a mano o digitales.

 

10. Mapas.

Pueden ser geográficos, históricos, climáticos o de otros muchos temas, siempre con leyenda y elementos gráficos. Constituyen una manera diferente de tratar los contenidos. Para hacer mapas digitales pueden usar StepMap.

11. Galería de fotos.

Otra manera de aprender es hacer fotografías y mostrar a través de las imágenes los conceptos aprendidos. Sobre todo si se incluyen explicaciones como pies de fotos. Algunas plataformas para almacenar las imágenes y crear álbumes son Flickr o Picasa.

12. Infografía.

En este tipo de gráficos los alumnos pueden explicar de manera visual algunos temas. Se trata de que analicen lo aprendido, lo sinteticen y lo muestren de manera sencilla con datos e imágenes.Easel.ly y Piktochart son dos herramientas sencillas para realizar infografías.

13. Cómic.

Este es otro tipo de narración que permite expresar los conocimientos adquiridos de una forma diferente. Los alumnos pueden desarrollar sus propios cómics con Pixton.

 

 

14. Mural digital.

Organizar las ideas en un póster también puede servir a tus alumnos para plasmar lo que saben. Con Mural.ly pueden hacerlo en versión digital.

15. Juego.

Otra forma de dar cuenta de sus conocimientos es diseñar un juego. Por ejemplo, pueden crear uno tipo Trivial, donde deberán escribir las preguntas y las respuestas.  

16. Línea del tiempo.

Muy útil para asignaturas como Historia o Literatura, o para  narrar cualquier tipo de proceso temporal. Además, gracias a herramientas digitales como Dipity o TimeRime, tus estudiantes pueden añadir imágenes, videos o enlaces a las cronologías.

17. Maqueta o diorama.

Elaborar pequeñas representaciones de la realidad puede servir, por ejemplo, para mostrar de una manera divertida cómo es un volcán, una aldea prehistórica o un corral de comedias, y hacer, a la vez, que los alumnos desarrollen su lado más creativo.

18. Blog.

Individual o colectivo, las bitácoras permiten a los estudiantes publicar y compartir conocimientos, ideas y opiniones. Mediante esta transmisión de contenidos demuestran sus conocimientos y, a la vez, siguen aprendiendo. Dos de las herramientas más conocidas para crearlos son Blogger y WordPress.

19. Web.

Un poco más complejo que escribir un blog es desarrollar una web sobre algún tema, ya que los alumnos tienen que diseñarla, estructurar las páginas y apartados, escribir los textos, incluir elementos gráficos etc. Algunas herramientas sencillas para crear webs son Weebly o Wix.

20. Video

(de animación y rodado). El lenguaje audiovisual está muy presente en la vida de los alumnos, pero no tanto en las aulas. Crear un video, grabado o de animación, les permitirá desarrollar su alfabetización audiovisual, expresar lo que saben de una manera distinta, trabajar la competencia digital y la creatividad, y aprender a estructurar y sintetizar la información. Con Wideo pueden crear videos de animación y con Windows Movie Maker editar las piezas grabadas.

21. Grabación de audio.

Mediante las grabaciones de audio tus alumnos pueden publicar entrevistas, realizar reportajes e incluso montar un programa de radio divulgativo. Es una manera divertida de trabajar los contenidos y aprender activamente. Pueden hacerlo con el programa Audacity o con Vocaroo.

22. Obra de teatro.

Combinar la creatividad y la imaginación que requiere el arte dramático con contenidos curriculares de distintas asignaturas es una manera diferente de aprender que motiva a los alumnos y les permite desarrollar distintas inteligencias. Mientras trabajan los contenidos establecidos por el docente deben escribir, interpretar, diseñar decorados, vestuario, luces etc.

23. Baile.

Como en el caso del teatro, la danza es otra arte escénica que ayuda a los alumnos a tratar los contenidos de una manera diferente y creativa, con la que pueden interpretar y expresar los contenidos aprendidos de forma simbólica y divertida. ¿Cómo sería una coreografía sobre los ecosistemas? ¿O un musical basado en la vida de Cervantes?

24. Mapa conceptual.

Es una de las formas más sencillas de saber si tus alumnos han comprendido los temas impartidos en clase, ya que tienen que plasmar todos los contenidos esenciales, estructurarlos y relacionarlos entre sí. Con Popplet o Gliffy pueden hacerlos en versión digital.

25. Canción.

¡Qué mejor que la música para motivar a los alumnos y despertar su sensibilidad artística y su oído! Mediante la composición de una canción pueden trabajar, asimilar, y explicar los contenidos estudiados a la vez que trabajan la expresión escrita y las habilidades musicales.

 

 

Como muestra, mira lo que hacen estos alumnos de 4.º de Primaria del Colegio Miraflores de Ourense:

http://www.aulaplaneta.com/2015/09/18/educacion-y-tic/matematicas-solidarias-compromiso-social-y-mucho-ritmo-para-innovar-en-clase-de-matematicas/

Este contenido ha sido publicado originalmente por Aula planeta en la siguiente dirección:

http://www.aulaplaneta.com/

 

10 Maneras de enseñar resiliencia a tus alumnos ¿Qué se entiende por resiliencia?

10 Maneras de enseñar resiliencia a

tus alumnos

¿Qué se entiende por resiliencia?

Si atendemos al diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, la resiliencia es la ‘capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas‘. Por tanto, se trata de un proceso de adaptación a las experiencias de vida difíciles o extremas. Realmente se trata de un término que no se tiene demasiado en cuenta en los centros escolares y mucho menos en los currículos de la mayoría de las asignaturas. Esto ha hecho replantearme sobre la necesidad y la obligación que tenemos los docentes de incorporar la resiliencia dentro de las aulas, para que los alumnos estén preparados para afrontar con las mejores garantías todos los reveses que puedan padecer a lo largo de su educación.

Los que me leéis con asiduidad sabéis de la importancia que otorgo a la empatía, a la capacidad de ponerse en la piel del otro, haciéndonos partícipes de sus anhelos y de sus preocupaciones. En este sentido te recomiendo la lectura del artículo titulado 5 consejos para aumentar la empatía de tus alumnos. Pero creo que hay que ir un paso más allá y también conceder la importancia que se merece a la resiliencia para afrontar con plenas garantías el desarrollo integral de nuestros alumnos. Porque en una sociedad donde cada vez se corre más, donde impera la cultura de la inmediatez y donde se niega el fracaso, se hace más necesario que nunca que elaboremos estrategias conjuntas para formar alumnos no sólo desde el punto de vista intelectual, sino también y, sobre todo, desde el punto de vista emocional. He aquí la razón de este artículo y por qué creo que la resiliencia puede ser un factor clave de prevención de problemas relacionados con el crecimiento personal de nuestros alumnos.

Mientras estás leyendo estas líneas pensarás que tal vez no eres capaz de enseñar resiliencia a tus alumnos. Pero te puedo asegurar que no es así. Es por ello que te invito a que leas estas sencillas pautas que puedes llevar a cabo en el aula y que te aseguro serán tremendamente útiles para tus alumnos. ¿Me acompañas?

¿Cómo podemos enseñar resiliencia a nuestros alumnos?

1. Enseña a hacer preguntas. Muchas veces los docentes pensamos en las respuestas que nos darán nuestros alumnos. El profesor pregunta y el alumno responde aquello que le hemos enseñado. En ocasiones es importante no sólo buscar respuestas, sino enseñar a elaborar preguntas. Las preguntas invitan a la reflexión, a la introspección y ello puede ser determinante en el caso de que un alumno pase por un momento personal difícil. Enséñale a formular preguntas abiertas y harás de tus alumnos unos alumnos más reflexivos y capaces de verbalizar sus preocupaciones y adversidades.

2. Enseña la bondad. Se trata de un recurso tremendamente efectivo. Consiste simplemente en pedirles que durante un día piensen en hacer un favor a alguien que les importe. Una vez hecho este favor deben verbalizarlo, es decir,  explicarlo en voz alta en clase. Los denominamos actos de bondad son un arma muy poderosa no sólo por el acto de bondad en sí, sino por la gratitud que recibimos por dicho acto. Si educas a tus alumnos en la bondad, les educarás también en la gratitud, serán más sensibles a lo que les rodea y les permitirá afrontarlo con la mejor de las predisposiciones. La gratitud es la que pone la perspectiva a los acontecimientos que podemos considerar como dramáticos.

3. Enseña hábitos saludables. Se trata de un aspecto fundamental si queremos educar a nuestros alumnos en la resiliencia. ¿Por qué? Pues porque una rutina saludable permitirá a los alumnos afrontar con mejores garantías cualquier adversidad que se les presente. Y por hábitos saludables debemos entender el ejercicio físico, dormir las horas necesarias, comer de forma saludable y evitar situaciones estresantes. Con estos cuatro hábitos las posibilidades de afrontar con éxito una crisis siempre aumentarán.

4. Enseña a ser útil. Debemos esforzarnos para que todos nuestros alumnos de una forma u otra se sientan útiles. Si conseguimos que tengan la sensación de que sirven para algo, automáticamente estaremos ante alumnos con una elevada autoestima. Serán alumnos felices y esta felicidad podrá ser determinante no sólo para afrontar sus adversidades, sino también para ayudar a sus compañeros ante cualquier dificultad que surja.

5. Enseña a ser positivo. Ser positivo consiste en valorar por encima de todo aquello que tienes. Personalmente creo que el ser positivo está muy ligado al autoconcepto que todos tenemos de nosotros mismos. En una sociedad tremendamente consumista hay que invertir los valores que tienen los alumnos, es decir, hay que fomentar no lo que les falta, sino todo aquello de que disponen. Hay que hacerles ver de manera consciente qué es aquello que tienen y qué es lo que más valoran de lo que tienen, tanto en lo material como en lo que a las personas y a sus cualidades se refiere. Haz reflexionar a tus alumnos. Convénceles de lo mucho que tienen, y de lo muchos que pueden dar. Para mí, educar a las personas en ser positivas es tremendamente importante y, de hecho, puede ser determinante en caso de que un alumno pueda experimentar algún tipo de pérdida, ya sea de un familiar, de algún animal de compañía, o de algún bien de carácter personal.

6. Potencia habilidades. Este es otro aspecto al que doy mucha importancia a la hora de educar a nuestros alumnos en la resiliencia. También va muy ligado al autoconcepto. De lo que se trata es de que sean los propios alumnos los que descubran por sí mismo cuáles son sus habilidades, es decir, en qué son buenos, en qué pueden llegar a ser los mejores. Una vez lo hayan descubierto, nosotros los docentes debemos potenciarlo al máximo con los recursos que tengamos. Pensar en el potencial que puede suponer una clase de treinta alumnos. Son treinta potencialidades distintas. Es un tesoro enorme del que ellos no tienen conciencia. Estas habilidades podrán resultar claves para poder superar experiencias que se consideren traumáticas.

7. Enseña a resolver problemas. Posiblemente este sea uno de mis apartados favoritos. La resolución de problemas, o de conflictos, es un aspecto que cada vez más se tiene en cuenta en los centros escolares. Debemos ver el conflicto como una oportunidad, es decir, como una posibilidad de resolución. En este sentido las comisiones de convivencia de los centros escolares resultan claves y la formación de alumnos mediadores son una extraordinaria oportunidad de gestionar conflictos no individuales, sino de centro. Aquellos centros escolares que tejen una buena red de mediadores, serán centros que estarán mucho más preparados para afrontar las adversidades que puedan surgir a lo largo de un curso escolar. Al respecto de este punto recomiendo la lectura del artículo El conflicto escolar visto como una oportunidad.

8. Fomenta la autoestima. La autoestima puede jugar un papel decisivo para hacer frente a cualquier tipo de adversidad. De ahí que debamos insistir en reforzar al máximo la autoestima de nuestros alumnos. Y podemos hacerlo a través de lo que denomino el refuerzo positivo incondicional, es decir, recordando y verbalizando lo mejor de cada uno de tus alumnos, celebrando sus logros y compartiéndolos con el resto.

9. Crea redes de apoyo. Es fundamental tranmitir a nuestros alumnos que nunca estarán solos ante una adversidad, sea del tipo que sea. De ahí que es muy recomendable establecer redes de apoyo entre compañeros, establecer grupos, alianzas entre los miembros de un mismo grupo. De lo que se trata es crear vínculos, de crear amistades que puedan perdurar en el tiempo y que en la adversidad se conviertan en una red de seguridad. A través de esta red de apoyo los alumnos pueden dar lo mejor de sí en cada momento y retroalimentarse de la gratitud y de la bondad que reciben por parte de sus compañeros.

10. Enseña perspectiva. La perspectiva no es más que el punto de vista desde el cual analizamos la realidad que nos rodea. Por eso es tan importante enseñarla a nuestros alumnos. Ante una situación adversa, la perspectiva juega un papel fundamental para la superación de la misma. De lo que se trata es de descentralizar el foco del dolor y del sufrimiento a través, precisamente, de la perspectiva. Con la perspectiva lo que lograremos es relativizar el problema, es decir, disminuir su magnitud y la desproporción que experimentamos en una situación adversa. A mayor perspectiva, mayor visión. Y a mayor visión, mayor será la posibilidad de superar una situación traumática.

Estas son algunas de las actuaciones que pueden hacer de tus alumnos unos alumnos educados en la resiliencia. Soy consciente de que el reto es ambicioso, pero estoy seguro de que hay muchas de las actuaciones que aquí propongo que en algún momento has puesto en práctica. De lo que se trata es de ir construyendo día a día, sesión a sesión , unos mecanismos que propicien que puedas enseñar la resiliencia en tus sesiones lectivas. Estoy convencido de que los centros que fomenten la cultura de la resiliencia serán los centros que mejor gestionen las adversidades, tanto desde el punto de vista individual como colectivo.

Quisiera acabar el artículo de hoy con una cita que me gusta recordar cuando me enfrento a alguna adversidad. Desconozco su autor y reza así:

No pidas una carga ligera, sino una espalda fuerte

 

ORIENTACIONES PARA INTERVENIR ANTE LA HIPERACTIVIDAD

ORIENTACIONES PARA INTERVENIR ANTE LA HIPERACTIVIDAD

 

 

 

¿Cómo pueden los padres definir reglas claras?

 

Para prevenir que el/la niño/a se meta en líos repetidamente y haya que explicarle una y otra vez las reglas, que por supuesto no obedece, y encima se sorprenda cuando le castigan, es importante que primero comprenda bien las reglas. Por ejemplo, si usted pide “debes ser ordenado/a” como uno de los objetivos es posible que no lo entienda por lo que es mejor definir este objetivo claramente: “limpia el cuarto una vez por semana, recoge los juguetes antes de acostarte y báñate cada noche”. Esta regla es mucho más clara y no se puede interpretar de otra forma. Además de explicarlas, conviene escribir las diferentes reglas, las consecuencias de no cumplirlas y los premios por cumplirlas. Ponga la lista en un sitio visible. Para niños/as pequeños/as ayudan los dibujos y los colores.

 

¿Cómo pueden los padres ayudar al/la niño/a a terminar una tarea dividiéndola en pasos menores?

 

A estos/as niños/as les cuesta muchísimo acabar encargos, tareas y deberes escolares. Para las tareas de la casa que tienen varios pasos es buena idea escribir los distintos pasos. Por ejemplo: recoger la mesa es:

1. vaciar los platos en la basura

2. vaciar los vasos en el fregadero

3. colocar los platos, vasos y cubiertos en el lavavajillas

4. poner jabón en el lavavajillas y encenderlo

5. limpiar las migas de la mesa

6. barrer el suelo

7. guardar el mantel y las servilletas

8. otra tarea más sencilla sería: tirar la basura es: 1. cerrar la bolsa, 2. bajar la bolsa al contenedor, 3. limpiar el cubo si se ha ensuciado, 4. poner una bolsa nueva en el cubo, 5. guardar las bolsas sin usar en su sitio.

Parece sencillo, pero el/la niño/a puede creer que “ha tirado la basura” si ha bajado la bolsa abierta al contenedor, dejando restos por la cocina y sin poner una bolsa limpia. Se pueden hacer tarjetas de diferentes tareas como limpiar el cuarto, preparar la cartera y la ropa la noche anterior, hacer la cama, echar la ropa sucia al cubo, ir a por el pan, prepararse por la mañana para ir al colegio (levantarse, lavarse, vestirse, desayunar, lavarse los dientes, coger la cartera, coger el bocadillo, etc).

 

¿Cómo pueden los padres aumentar la estructura y el orden de la casa?

 

Hay que buscarle un sitio a cada cosa. Por ejemplo, para ordenar los juguetes ponga etiquetas o dibujo de cada cosa en las cajas donde vaya a guardarlos. Nada más acabar de jugar el/la niño/a deberá ordenar los juguetes. Para facilitar la rutina de la mañana tenga un lugar definido para el abrigo, la cartera, los zapatos, la bolsa de gimnasia, el bocadillo, etc. La noche anterior asegúrese de que el/la niño/a coloca todo el material en la cartera y deje cada cosa en su sitio, así evitará prisas, olvidos y broncas por la mañana. Se pueden utilizar relojes o cronómetros (como los que se usan en la cocina) para marcarle el tiempo. Por ejemplo, si faltan 20 minutos para acostarse, ponga el reloj con alarma para que suene en 20 minutos, y evitaremos el “venga, que ya ha pasado media hora”.

 

¿Cómo pueden los padres establecer rutinas estables y predecibles para estructurar el tiempo?

 

Las rutinas ayudan a estructurar el día y producen seguridad en el/la niño/a. Si él/ella sabe lo que va a pasar no lo sorprenderán las cosas y estará preparado/a. Casi todos los colegios hacen que el/la niño/a escriba su horario de clases. De la misma forma, podemos escribir un horario de actividades, tiempos de estudio, tareas y ocio después del colegio, que incluya las tareas extraescolares y también lo que se planea hacer el fin de semana. El horario debe estar en un sitio visible y, si hay que hacer algún cambio, se avisa al/la niño/a con tiempo suficiente y se le recuerda alguna vez. Los horarios de cenar, irse a dormir, etc, deben ser bastante estables y no hacer cambios arbitrarios o por sorpresa.

 

 

 ¿Cómo pueden los padres eliminar ruidos y distracciones?

 

Cuando el/la niño/as está (por fin) haciendo algo concreto, como uno de sus encargos ( los escritos en las tarjetas) o sus deberes escolares, es fácil que se distraiga con cualquier ruido como la TV, el teléfono o el tráfico de la calle, por lo que hay que evitar que haya cualquier tipo de distracción a su alrededor. Pregúntele al/la niño/a dónde cree que se concentrará mejor. A lo mejor usted cree que un sitio aislado y muy silencioso será el mejor, pero el/la niño/a trabaja mejor en un sitio tranquilo pero no alejado, donde usted pueda supervisarle de vez en cuando.

 

¿Cómo pueden los padres modificar la conducta del/la niño/a?

 

Para modificar la conducta de su hijo/a debe:

  • Definir el problema de forma positiva. Definir claramente los comportamientos deseados sin mencionar el problema. Por ejemplo, en vez de reñirle por moverse, intente que esté sentado/a toda la cena; en vez de eliminar el desorden, intente que deje el material escolar en su sitio.
  • Establecer metas razonables. Seguramente es demasiado pedir que su hijo/a permanezca sentado/a toda la cena todas las veces, por lo que es mejor empezar por periodo de 5 minutos, luego 6, luego 7, etc. Para preparar las cosas para el colegio, empiece por el abrigo y la cartera, luego añada el bocadillo, luego la bolsa de gimnasia...
  • Avanzar poco a poco. Felicite a menudo a su hijo/a por obtener metas intermedias, haga comentarios específicos (qué bien que has estado sentado), evitando generalizaciones (¡qué bueno has sido!), o “elogios negativos” (¡ya era hora de que lo hicieras bien!).

 

¿Cómo pueden los padres motivar al/la niño/a?

 

La mejor manera es utilizar un sistema de puntos, dándole puntos, estrellas o fichas cuando  consiga alcanzar un objetivo marcado. Cada 5 puntos se pueden canjear por algo concreto (como ir al parque, unos cromos, leerle un cuento). Un punto por ordenar el cuarto, y dos por hacerlo sin que se lo digan. Se pueden perder puntos por hacer mal las cosas, pero siempre deben ganar más de las que pierde. Haga una lista de cómo se pueden ganar los puntos y por qué se pueden cambiar.

 

¿Cómo pueden los padres aumentar la disciplina?

 

Los padres deben hacer que el/la niño/a “sufra las consecuencias” de saltarse las normas inmediatamente o se le olvidará. No sirve de nada perder energía riñéndole si ha hecho mal hace mucho, porque no conectará la acción con la consecuencia. Cuando el/la niño/a se está saltando una norma, hay que recordarle que lo está haciendo, y que vamos a contar hasta tres, y si no deja de hacer lo que está haciendo, lo/a pondremos en tiempo fuera (un lugar sin estímulos, durante unos minutos). Al contar levantamos los dedos: uno, dos, y...tres (se puede contar despacio, pero no cuente hasta cuatro). Hay veces que lo/a pondremos en tiempo fuera por infracciones graves sin contar hasta tres.

 

¿Cómo pueden los padres ayudar al/la niño/a a obedecer mejor?

 

Cuando se manda algo al/la niño/a hay que seguir unos pasos:

 

  1. Es imprescindible que el/la niño/a sepa las normas y que éstas sean claras. No son buenas normas “portarse bien” o “ser bueno”, es mejor “no pegar”, “no gritar”, “no insultar”,”recoger la mesa después de cenar”, etc.
  2. Es importante que sepa que va a pasar si las normas no se cumplen.
  3. Ayuda si se le recuerda o avisa con antelación: “acuérdate de que se acerca la hora de acostarte”, “¿Qué te he pedido que hagas?”.
  4. Ayuda si repetimos la orden, pero sin tono de hastío o aburrimiento.
  5. Si no obedece hay que llevarlo/a a donde tenga que hacer la orden: llevarlo/a de la mano a su cuarto para recoger los juguetes.
  6. Es bueno ayudarlo/a, por ejemplo echarle una mano (pero que no seamos nosotros los que le hagamos; que sea él/ella).
  7. Finalmente es fundamental alabarlo/a y animarlo/a mientras lo esté haciendo (¡qué bien te está saliendo, anda, venga, que acabamos enseguida!) y cuando lo haya terminado (“ya verás qué orgullosos se pone papá/mamá cuando vea lo bien que lo has hecho”. “qué niño/a más obediente”).
  8. NUNCA, NUNCA, NUNCA hablarle con sarcasmo (“ya era hora de que lo hicieras”, “a buenas horas lo haces, para eso mejor no hacerlo”, “encima te voy a dar un premio por hacerlo una vez y no hacerlo treinta...).

 

¿Cómo se pone al/la niño/a en “tiempo fuera”?

 

Si hay que castigarlo/a se le sienta en una silla en un sitio tranquilo/a y aburrido/a (el pasillo) pero no aislado. El/la niño/a debe permanecer sentado/a tantos minutos (cronometrados) como años tenga. Tiene que quedarse sentado/a y callado/a. Cuando suene el reloj de la alarma nos dirá porqué le hemos castigado. Si no quiere decirlo estará otro minuto sentado/a y callado/a, y así hasta que ceda. Luego hay que decirle que ha hecho muy bien el tiempo fuera y que lo/a perdonamos. El tiempo fuera es una consecuencia que obtiene el/la niño/a de una situación problemática y se puede hacer en casa o fuera de casa. Si se aplica inmediatamente puede enseñarle al/la niño/a a predecir qué comportamientos producirán consecuencias negativas, y aprenderá a obedecer antes del tiempo fuera, cuando contemos hasta tres. Para evitar estar siempre riñendo, intente prestar “atención positiva” a su hijo/a.

 

¿Cómo pueden los padres prestar “atención positiva” a su hijo/a?

 

Para niños/as menores de nueve años elija unos 10 o 20 minutos cada día que serán su “tiempo especial” con usted. No puede haber otros/as niños/as. Pase ese tiempo exclusivamente con su hijo/a.

Para niños/as mayores de 9 años simplemente busque un rato con su hijo/a. Juegue con él/ella y únase a él/ella interesándose por lo que hace. No intente dirigir ni controlar la actividad, simplemente relájese y páselo bien intentando entender lo que hace. Tras unos minutos observando describa en voz alta algunas de las cosas que hace para mostrar su interés: “así que estás jugando con los coches en el garaje, y los estás lavando porque va a ir a una carrera”, pero no haga preguntas, excepto si no entiende lo que hace.

 

Diga a veces una frase de admiración o que lo anime: “pero qué bien lo haces, me gusta mucho cuando juegas así en silencio”. Si no puede decir nada, déle: un abrazo, una caricia en la espalda o la cabeza, una sonrisa, un guiño...Si el/la niño/a empieza a portarse mal, intente ignorarlo/a mirando a otro lado, pero si sigue, dígale que no va a jugar más hoy con él/ella porque se está portando mal, levántese y salga de la habitación. Si se siente incómodo/a hablándole de esta manera a su hijo/a, practique.   

 

 

OTRAS ORIENTACIONES PARA REDUCIR LA HIPERACTIVIDAD

 

Actuaciones de los padres

 

-    Si pretendemos ayudar al/la niño/a “hiperactivo/a” a aprender a atender y concentrarse, necesitamos conocer  cuáles son sus intereses. Cuando se descubren tales intereses se pueden utilizar como base del aprendizaje asociado. Si el/la niño/a está interesado/a en los dinosaurios, por ejemplo, se le pueden asignar numerosos ejercicios de lectura, aritmética..., utilizando directamente estos intereses: los dinosaurios pueden ser el tema de las lecturas, se pueden montar historias, desarrollar el vocabulario, se puede contar, clasificar, registrar...

 

Estos intereses deberían emplearse también para recompensar al/la niño/a al atender y completar tareas en casa, por ejemplo,” cuando termines las tareas puedes ir a jugar con tus muñecos “.

 

-    Ayudar al/la niño/a a desarrollar su autoconfianza: reconocer sus progresos y ejecuciones por lentas o limitadas que éstas sean. Exija logros graduales (unos momentos de permanecer sentado/a, de estar atento/a...)

 

-    Ofrecerle demostraciones de cariño y aceptación a través de frecuentes caricias, zalamerías, cosquillas, besos. El/la niño/a hiperactivo/a necesita gran cantidad de contacto físico y afecto paterno. Utilice esas demostraciones como refuerzo cada vez que se aproxime a la conducta contraria que se pretende modificar: permanecer más tiempo sentado/a;  estar quieto/a, reposado/a; escuchar, seguir instrucciones. Sorprender al/la niño/a “siendo bueno/a “o haciendo alguna cosa deseable, tan frecuentemente como sea posible, y recompensarle con una alabanza, sonrisa...

 

-    Utilice la atención adecuadamente: sólo recibirá atención cuando esté tranquilo/a, quieto/a, atento/a, pero no cuando haga lo contrario porque entonces estamos reforzando la conducta inadecuada. Se debe evitar la excesiva exaltación emocional.

 

-    El/la niño/a no debe recibir excesivas instrucciones: ¡no te levantes!, ¡no molestes!, ¡estate quieto/a! Explicarle claramente lo que debe hacer y qué obtiene a cambio. Use gestos u otras claves para recordar las normas.

 

-    Implicar al/la niño/a en el establecimiento de reglas, esparcimientos y otras actividades personales y familiares.

 

-    Decir al/la niño/a cuando se porta mal y explicarle lo que usted siente acerca de su conducta; después proponerle que ponga en práctica otras formas de conducta más aceptables.

 

-    Poner en práctica algunos de los ejercicios relacionados en el programa que se lleva a cabo en la escuela para el entrenamiento en relajación, reducción de la tensión, la inhibición muscular o el desarrollo de la atención y concentración (técnica de entrenamiento conductual cognitivo).

 

-    Ser estable y perseverante con el programa. El reducir la conducta hiperactiva lleva tiempo. Debe establecerse un momento del día para el desarrollo de los ejercicios, por ejemplo, antes del desayuno, a la vuelta de la escuela o inmediatamente antes de acostarse.

 

-    Procurar darle un lugar para trabajar o estudiar sin interrupciones y de esta forma fomentar la capacidad del/la niño/a para concentrarse en lo que está haciendo, reduciendo, en todo lo que sea posible, los estímulos perturbadores de su entorno.

 

-    Como padres es preciso ser estables con la propia conducta. Recordar que cada vez que cambia su reacción conductual ante el/la niño/a le confunde acerca de lo que usted espera o cómo desea que actúe.

 

AGRESIVIDAD INFANTIL

AGRESIVIDAD INFANTILAPRENDER A AUTOCONTROLARSE

problema de la agresividad infantil es uno de los trastornos que más invalidana padres y maestros junto con la desobediencia. A menudo nos enfrentamos a niños agresivos, manipuladores o rebeldes pero no sabemos muy bien como debemos actuar con ellos o cómo podemos incidir en su conducta para llegar a cambiarla.

En este artículo intentaremos definir los síntomas para una correcta evaluación de este trastorno caracterial y establecer diferentes modos de tratamiento.Un buen pronóstico a tiempo mejora siempre una conducta anómala que habitualmente suele predecir otras patologías psicológicas en la edad adulta.                                           Un comportamiento excesivamente agresivo en la infancia si no se trata derivará probablemente en fracaso escolar y en conducta antisocial en la adolescencia y edad adulto porque principalmente son niños con dificultades para socializarse y adaptarse a su propioambiente.El comportamiento agresivo complica las relaciones sociales que va estableciendoa lo largo de su desarrollo y dificulta por tanto su correcta integración en cualquier ambiente. El trabajo por tanto a seguir es la socialización de la conducta agresiva, esdecir, corregir el comportamiento agresivo para que derive hacia un estilo de comportamiento asertivo.Ciertas manifestaciones de agresividad son admisibles en una etapa de la vidapor ejemplo es normal que un bebé se comporte llorando o pataleando; sin embargo,estas conductas no se consideran adecuadas en etapas evolutivas posteriores.

¿QUÉ ENTENDEMOS POR "AGRESIVIDAD INFANTIL"?

1Hablamos de agresividad cuando provocamos daño a una persona u objeto. La conducta agresiva es intencionada y el daño puede ser físico o psíquico. En el caso de los niños la agresividad se presenta generalmente en forma directa ya sea en formade acto violento físico (patadas, empujones,...) como verbal (insultos, palabrotas,...).Pero también podemos encontrar agresividad indirecta o desplazada, según la cual el niño agrede contra los objetos de la persona que ha sido el origen del conflicto, o agresividad contenida según la cual el niño gesticula, grita o produce expresiones facialesde frustración.

2.Independientemente del tipo de conducta agresiva que manifieste un niño el denominador común es un estímulo que resulta nocivo o aversivo frente al cual la víctimase quejará, escapará, evitará o bien se defenderá.Los arrebatos de agresividad son un rasgo normal en la infancia pero algunos niños persisten en su conducta agresiva y en su incapacidad para dominar su mal genio.Este tipo de niños hace que sus padres y maestros sufran siendo frecuentemente niños frustrados que viven el rechazo de sus compañeros no pudiendo evitar su conducta.

 

TEORÍAS EXPLICATIVAS DEL COMPORTAMIENTO AGRESIVO

Las teorías del comportamiento agresivo se engloban en: Activas y Reactivas.

1. Las Activas: son aquellas que ponen el origen de la agresión en los impulsos internos,lo cual vendría a significar que la agresividad es innata, que se nace o no con ella. Defensores de esta teoría: Psicoanalíticos y Etológicos.

2. Las Reactivas: ponen el origen de la agresión en el medio ambiente que rodea al individuo. Dentro de éstas podemos hablar de las teorías del impulso que dicen que la frustración facilita la agresión, pero no es una condición necesaria paraella, y la teoría del aprendizaje social que afirma que las conductas agresivas pueden aprenderse por imitación u observación de la conducta de modelos agresivos.

TEORÍA DEL APRENDIZAJE SOCIAL

Para poder actuar sobre la agresividad necesitamos un modelo o teoría que seguir y éste, en nuestro caso, será la teoría del aprendizaje social. Habitualmente cuando un niño emite una conducta agresiva es porque reacciona ante un conflicto. Dicho conflictopuede resultar de:

1. Problemas de relación social con otros niños o con los mayores, respecto de satisfacerlos deseos del propio niño.

2. Problemas con los adultos surgidos por no querer cumplir las órdenes que éstos le imponen.

3. Problemas con adultos cuando éstos les castigan por haberse comportado inadecuadamente,o con otro niño cuando éste le agrede.Sea cual sea el conflicto, provoca en el niño cierto sentimiento de frustración u emoción negativa que le hará reaccionar. La forma que tiene de reaccionar dependeráde su experiencia previa particular. El niño puede aprender a comportarse de forma agresiva porque lo imita de los padres, otros adultos o compañeros. Es lo que se llama Modelamiento. Cuando los padres castigan mediante violencia física o verbal se convierten para el niño en modelos de conductas agresivas. Cuando el niño vive rodeado de modelos agresivos, va adquiriendo un repertorio conductual caracterizado por una cierta tendencia a responder agresivamente a las situaciones conflictivas que puedan surgir con aquellos que le rodean.

El proceso de modelamiento a que está sometido elniño durante su etapa de aprendizaje no sólo le informa de modos de conductas agresivos sino que también le informa de las consecuencias que dichas conductas agresivas tienen para los modelos. Si dichas consecuencias son agradables porque se consigue loque se quiere tienen una mayor probabilidad de que se vuelvan a repetir en un futuro.Por ejemplo, imaginemos que tenemos dos hijos, Luis y Miguel, de 6 y 4 años respectivamente.Luis está jugando con una pelota tranquilamente hasta que irrumpe Miguel y empiezan a pelear o discutir por la pelota. Miguel grita y patalea porque quiere jugarcon esa pelota que tiene Luis. Nosotros nos acercamos y lamentándonos del pobre Miguel,increpamos a Luis para que le deje la pelota a Miguel. Con ello hemos conseguidoque Miguel aprenda a gritar y patalear cuando quiera conseguir algo de su hermano. Esdecir, hemos reforzado positivamente la conducta agresiva de Miguel, lo cual garantizaque se repita la conducta en un futuro.De acuerdo con este modelamiento la mayoría de los adultos estamos enseñandoa los niños que la mejor forma de resolver una situación conflictiva es gritándoles,porque nosotros les gritamos para decir que no griten. ¡Menuda contradicción! Y si nos fijamos como esa solemos hacer muchas a diario.

FACTORES INFLUYENTES EN LA CONDUCTA AGRESIVA

Como ya hemos dicho, uno de los factores que influyen en la emisión de la conducta agresiva es el factor sociocultural del individuo. Uno de los elementos más importantes del ámbito sociocultural del niño es la familia. Dentro de la familia, ademásde los modelos y refuerzos, son responsables de la conducta agresiva el tipo de disciplinaa que se les someta. Se ha demostrado que tanto un padre poco exigente como uno con actitudes hostiles que desaprueba constantemente al niño, fomentan el comportamiento agresivo en los niños.

Otro factor familiar influyente en la agresividad en los hijos es la incongruencia en el comportamiento de los padres. Incongruencia se da cuando los padres desaprueban la agresión castigándola con su propia agresión física o amenazante hacia el niño.Asimismo se da incongruencia cuando una misma conducta unas veces es castigada yotras ignorada, o bien, cuando el padre regaña al niño pero la madre no lo hace. Lasrelaciones deterioradas entre los propios padres provoca tensiones que pueden induciral niño a comportarse de forma agresiva.Dentro del factor sociocultural influirían tanto el tipo de barrio donde se vivacomo expresiones que fomenten la agresividad "no seas un cobarde"

.4.En el comportamiento agresivo también influyen los factores orgánicos que incluyen factores tipo hormonales, mecanismos cerebrales, estados de mala nutrición,problemas de salud específicos.Finalmente cabe mencionar también el déficit en habilidades sociales necesariaspara afrontar aquellas situaciones que nos resultan frustrantes. Parece que la ausenciade estrategias verbales para afrontar el estrés a menudo conduce a la agresión(Bandura, 1973).

¿CÓMO VALORAR SI UN NIÑO ES O NO AGRESIVO?

Ante una conducta agresiva emitida por un niño lo primero que haremos será identificar los antecedentes y los consecuentes de dicho comportamiento.

Los antecedentesnos dirán cómo el niño tolera la frustración, qué situaciones frustrantes soportamenos. Las consecuencias nos dirán qué gana el niño con la conducta agresiva. Porejemplo: " Una niña en un parque quiere bajar por el tobogán pero otros niños se le cuelan deslizándose ellos antes. La niña se queja a sus papás los cuales le dicen que les empuje para que no se cuelen. La niña lleva a cabo la conducta que sus padres han explicadoy la consecuencia es que ningún otro niño se le cuela y puede utilizar el tobogán tantas veces desee.

"Pero sólo evaluando antecedentes y consecuentes no es suficiente para lograr una evaluación completa de la conducta agresiva que emite un niño, debemos también evaluar si el niño posee las habilidades cognitivas y conductuales necesarias para respondera las situaciones conflictivas que puedan presentársele. También es importante saber cómo interpreta el niño una situación, ya que un mismo tipo de situación puede provocar un comportamiento u otro en función de la intención que el niño le adjudique.Evaluamos así si el niño presenta deficiencias en el procesamiento de la información.Para evaluar el comportamiento agresivo podemos utilizar técnicas directas comola observación natural o el autorregistro y técnicas indirectas como entrevistas,cuestionarios o autoinformes. Una vez hemos determinado que el niño se comportaagresivamente es importante identificar las situaciones en las que el comportamiento del niño es agresivo. Para todos los pasos que comporta una correcta evaluación disponemosde múltiples instrumentos clínicos que deberán utilizarse correctamente por elexperto para determinar la posterior terapéutica a seguir.

¿CÓMO PODEMOS TRATAR LA CONDUCTA AGRESIVA?

Cuando tratamos la conducta agresiva de un niño en psicoterapia es muy importanteque haya una fuerte relación con todos los adultos que forman el ambiente delniño porque debemos incidir en ese ambiente para cambiar la conducta. Evidentementeel objetivo final es siempre reducir o eliminar la conducta agresiva en todas las situacionesque se produzca pero para lograrlo es necesario que el niño aprenda otro tipo

5.de conductas alternativas a la agresión. Con ello quiero explicar que el tratamientotendrá siempre dos objetivos a alcanzar, por un lado la eliminación de la conducta agresiva y por otro la potenciación junto con el aprendizaje de la conducta asertiva osocialmente hábil. Son varios los procedimientos con que contamos para ambos objetivos.Cuál o cuáles elegir para un niño concreto dependerá del resultado de la evaluación.

Vamos a ver algunas de las cosas que podemos hacer. En el caso de un niño que hemos evaluado se mantiene la conducta agresiva por los reforzadores posteriores setrataría de suprimirlos, porque si sus conductas no se refuerzan terminará aprendiendoque sus conductas agresivas ya no tienen éxito y dejará de hacerlas. Este métodose llama extinción y puede combinarse con otros como por ejemplo con el reforzamiento positivo de conductas adaptativas. Otro método es no hacer caso de la conducta agresiva pero hemos de ir con cuidado porque sólo funcionará si la recompensa que el niño recibía y que mantiene la conducta agresiva era la atención prestada. Además si laconducta agresiva acarrea consecuencias dolorosas para otras personas no actuaremos nunca con la indiferencia.

Tampoco si el niño puede suponer que con la indiferencia loúnico que hacemos es aprobar sus actos agresivos.Existen asimismo procedimientos de castigo como el Tiempo fuera o el coste de respuesta. En el primero, el niño es apartado de la situación reforzante y se utiliza bastante en la situación clase. Los resultados han demostrado siempre una disminución en dicho comportamiento. Los tiempos han de ser cortos y siempre dependiendo de laedad del niño. El máximo sería de 15 minutos para niños de 12 años. El coste de respuestaconsiste en retirar algún reforzador positivo contingentemente a la emisión dela conducta agresiva. Puede consistir en pérdida de privilegios como no ver la televisión.El castigo físico no es aconsejable en ninguno de los casos porque sus efectosson generalmente negativos: se imita la agresividad y aumenta la ansiedad del niño.

ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE EL CASTIGO

1. Debe utilizarse de manera racional y sistemática para hacer mejorar la conducta del niño. No debe depender de nuestro estado de ánimo, sino de la conducta emitida

.2. Al aplicar el castigo no lo hagamos regañando o gritando, porque esto indica que nuestra actitud es vengativa y con frecuencia refuerza las conductas inaceptables.

3. No debemos aceptar excusas o promesas por parte del niño.

4. Hay que dar al niño una advertencia o señal antes de que se le aplique el castigo.

5. El tipo de castigo y el modo de presentarlo debe evitar el fomento de respuestas emocionales fuertes en el niño castigado

.6. Cuando el castigo consista en una negación debe hacerse desde el principio deforma firme y definitiva.

7. Hay que combinar el castigo con reforzamiento de conductas alternativas que ayudarán al niño a distinguir las conductas aceptables ante una situación determinada.

8. No hay que esperar a que el niño emita toda la cadena de conductas agresivas para aplicar el castigo, debe hacerse al principio

.9. Cuando el niño es mayor, conviene utilizar el castigo en el contexto de un contratoconductual, puesto que ello ayuda a que desarrolle habilidades de autocontrol.

10. Es conveniente que la aplicación del castigo requiera poco tiempo, energía y molestias por parte del adulto que lo aplique.

¿QUÉ PUEDEN HACER LOS PADRES Y LOS PROFESORES?

Una vez llegados a este apartado la mayoría de vosotros ya os habéis dadocuenta que la conducta agresiva de vuestro hijo es una conducta aprendida y como talpuede modificarse. También la lectura anterior os ha servido para comprender que una conducta que no se posee puede adquirirse mediante procesos de aprendizaje.

Con locual el objetivo en casa o en la escuela también será doble: desaprender la conducta inadecuada y adquirir la conducta adaptativa.Si montamos un programa para cambiar la conducta agresiva que mantiene nuestro hijo hemos de tener en cuenta que los cambios no van a darse de un día a otro, sinoque necesitaremos mucha paciencia y perseverancia si queremos solucionar el problemadesde casa. Una vez tenemos claro lo anterior, la modificación de la conducta agresivapasará por varias fases que irán desde la definición clara del problema hasta laevaluación de los resultados. Vamos a analizar por separado cada una de las fases que deberemos seguir:

1. Definición de la conducta: Hay que preguntarse en primer lugar qué es lo que nuestro hijo está haciendo exactamente. Si nuestra respuesta es confusa y vaga,será imposible lograr un cambio. Con ello quiero decir que para que esta fase se resuelva correctamente es necesario que la respuesta sea específica. Esas serán entonces nuestras conductas objetivo (por ejemplo, el niño patalea, da gritos cuando...)

.2. Frecuencia de la conducta: Confeccione una tabla en la que anotar a diario cuantasveces el niño emite la conducta que hemos denominado globalmente agresiva.Hágalo durante una semana.

3. Definición funcional de la conducta: Aquí se trata de anotar qué provocó la conductapara lo cual será necesario registrar los antecedentes y los consecuentes Examine también los datos específicos de los ataques. Por ejemplo, ¿en qué momentosson más frecuentes?

4. Procedimientos a utilizar para la modificación de la conducta: Nos planteamosen la elección dos objetivos: debilitar la conducta agresiva y reforzar respuestas alternativas deseables (si esta última no existe en el repertorio de conductas delniño, deberemos asimismo aplicar la enseñanza de habilidades sociales).

• Ciertas condiciones proporcionan al niño señales de que su conducta agresivapuede tener consecuencias gratificantes. Por ejemplo, si en el colegio a la hora del patio y no estando presente el profesor, el niño sabe que pegando a suscompañeros, éstos le cederán el balón, habrá que poner a alguien que controle eljuego hasta que ya no sea preciso.

• Debemos reducir el contacto del niño con los modelos agresivos. Por el contrario,conviene suministrar al niño modelos de conducta no agresiva. Muéstrele asu hijo otras vías para solucionar los conflictos: el razonamiento, el diálogo, elestablecimiento de unas normas. Si los niños ven que los adultos tratan de resolverlos problemas de modo no agresivo, y con ello se obtienen unas consecuencias agradables, podrán imitar esta forma de actuar. Para vosotros papásentrenar el autocontrol con ayuda de la relajación.

• Reduzca los estímulos que provocan la conducta. Enseñe al niño a permanecer encalma ante una provocación.

• Recompense a su hijo cuando éste lleve a cabo un juego cooperativo y asertivo.

• Existe una cosa denominada "Contrato de contingencias" que tiene como finalidad comprometer al niño en el proyecto de modificación de conducta. Es un escrito entre padres e hijo en el que se indica qué conductas el niño deberá emitirante las próximas situaciones conflictivas y que percibirá por el adulto a cambio.

Asimismo se indica qué coste tendrá la emisión de la conducta agresiva. Elcontrato deberá negociarse con el niño y revisarlo cada X tiempo y debe estarbien a la vista del niño. Tenemos que registrar a diario el nivel de comportamiento del niño (como hacíamos con la enuresis) porque la mera señal del registroya actúa como reforzador. Esto es adecuado para niños a partir de 9 años.

5. Ponga en práctica su plan: Cuando ya ha determinado qué procedimiento utilizará,puede comenzar a ponerlo en funcionamiento. Debe continuar registrando la frecuenciacon que su hijo emite la conducta agresiva para así comprobar si el procedimientoutilizado está o no resultando efectivo. No olvide informar de la estrategia escogida a todos aquellos adultos que formen parte del entorno del niño. Mantengauna actitud positiva. Luche por lo que quiere conseguir, no se desmorone confacilidad. Por último, fíjese en los progresos que va haciendo su hijo más que en losfallos que pueda tener. Al final se sentirán mejor tanto Vd. Como su hijo.

6. Evalúe los resultados del programa: Junto con el tratamiento que usted ha decidido para eliminar la conducta agresiva de su hijo, usted ha planificado también reforzar las conductas alternativas de cooperación que simbolizan una adaptación alambiente.

Una vez transcurridas unas tres semanas siguiendo el procedimiento,deberá proceder a su evaluación. Si no hemos obtenido ninguna mejora, por pequeña que sea, algo está fallando, así es que deberemos volver a analizar todos los pasosprevios. La hoja de registro nos ayudará para la evaluación de resultados. Si hemos llegado al objetivo previsto, es decir, reducción de la conducta agresiva, nodebemos dejar drásticamente el programa que efectuamos, porque debemos prepararel terreno para que los resultados conseguidos se mantengan. Para asegurarsede que el cambio se mantendrá, elimine progresivamente los reforzadores materiales.No olvide que los procedimientos que usted como padre ha aprendido, lospuede interiorizar para provocar en usted mismo un cambio de actitud. Practique elentrenamiento en asertividad y será más feliz.

TEST DE LA CASA

El test de la casa.

El test de la casa, normalmente aplicado a población infantil, nos informará acerca de las emociones relativas a los familiares y consigo mismo. Toda interpretación de un dibujo debe ser analizado en base a dos campos el plano de contenido y el plano gráfico. Este tipo de dibujos son muy frecuentes en niños, esto puede ser debido a la necesidad de buscar cobijo, de sentirse seguros y el deseo de protección frente al exterior. Por lo general, a partir de los 6 años ya se podrán realizar dibujos ricos en elementos y con una gran expresividad.


Instrucciones para el desarrollo de la prueba

  • El soporte y el útil empleado: da igual el tamaño, aunque lo más normal será usar un papel de tamaño folio A4. Es importante que sea un papel en blanco, sin cuadrículas ni renglones. Respecto a los útiles empleados, a gusto del dibujante.
  • Ambiente: debemos crear un ambiente seguro y calmado, donde el niño se sienta seguro y cómodo.
  • Consigna: al sujeto se le pedirá: – Por favor, dibuja una casa sin preocuparte por lo bonito que pueda resultar tu dibujo.
  • Desarrollo del dibujo: momento importante para el evaluador, deberá prestar atención a los detalles que surjan durante el dibujo de la casa, por ejemplo, puede haber paradas, tachones, dudas, preguntas, gestos…
  • Preguntas al terminar:
    • ¿Está la casa habitada o deshabitada?
    • ¿Quiénes viven en ella?
    • ¿Conoces a sus habitantes?
    • ¿Qué relación tienes con ellos?
    • ¿Quién es el dueño de la casa?
  • Si responde que la casa está deshabitada podemos hacer alguna pregunta más como:
    • ¿Por qué está deshabitada?
    • ¿Es de alguien la casa?
    • ¿Esa persona piensa vivir en ella en algún momento?
    • ¿Está la casa en mal o buen estado?
  • Intentar que las respuestas sean abiertas, evitar los -SI- y -NO-
  • El dibujo se da por terminado cuando el niño así lo considere, nunca antes.

A la hora de observar como realiza el dibujo es importante prestar atención al cómo y al dónde, en cuanto a cada elemento dibujado -chimenea, camino, valla, ventana- , ya que uno de los aspectos más relevantes es el simbolismo del espacio .

Recordar que las perturbaciones, distorsiones u omisiones darán cuenta de si existe alguna perturbación psicodinámica de la personalidad debiendo entonces investigar su origen.

Aspectos a tener en cuenta como evaluadores

 

  • Las interpretaciones se basan en estudios estadísticos que determinan el porcentaje de casos en los que un elemento, rasgo o cualquiera sea de las características del dibujo se asocia con un aspecto de la psicología. A pesar de este punto favorable, la interpretación no es una ciencia exacta por lo que debemos ser prudentes en este aspecto, sobre todo en según que contextos, sin embargo, no dejemos llevarnos por la no exactitud de este método porque puede ser de gran ayuda y por supuesto muy preciso y válido. Además como nota, recordar que no hay ciencia que cree ciencia con un nivel de confianza del 100%, siempre se habla de porcentajes, márgenes de error, errores máximos, intervalos de confianza, etc.
  • No interpretar signos aislados, siempre en contexto. Además debido al intenso proceso de desarrollo al que está sometido el niño debemos plantearnos la posibilidad de si el rasgo asociado a un grafismo es temporal o puede ser estable. Es frecuente que se reproduzcan escenas o emociones recientes y debemos saber reconocerlas para evitar interpretarlas como estables en la personalidad del niño.
  • Complementar los resultados de esta prueba con otros, siempre es necesario obtener la información de varias fuentes.
  • Las interpretaciones deben haber sido realizadas teniendo en cuenta la edad del niño, pues varían según edades.

 

 

Elementos e interpretación

 

  • Casa grande: alegría, bienestar, extraversión, capacidad de querer, amigable.
  • Casa pequeña: reserva, introversión, protección ante los otros.
  • Casa alta: si la altura es excesiva, necesidad de crecer y emancipación.
  • Casa baja: angustia, preocupación, a disgusto en su casa, especialmente si no hay línea que delimite la casa con el suelo.
  • Casa dos pisos: a partir de 9-10 años, sensible observador, detallista, buenas relaciones familiares.
  • Casa castillo: niño soñador, gran imaginación o ansías de poder, carácter fuerte. En niños mayores, huida de la realidad, necesidad de protección.
  • Casa dibujada a lo lejos: tristeza, desesperanza, añoranza, alejamiento emocional.
  • Casa vallada o delimitada: a más cerramiento, más introversión y desconfianza del exterior, si presenta formas angulosas y puntiagudas agresividad en su retraimiento.
  • Casa con jardín: signo positivo, sensibilidad, extraversión, apertura hacia los demás.

La puerta:

 

La puerta simboliza una frontera entre el interior y el exterior, entre la seguridad de lo conocido y el desconocimiento acerca del exterior, incluso desconfianza o necesidad de protección. Las características estructurales de la puerta nos guiarán para la interpretación acerca de las relaciones del niño en el ambiente.

  • Sin puerta o puerta muy pequeña: bloqueo, introversión, quiere cortar las relaciones exteriores, timidez, autoprotección, necesidad de su propio espacio.
  • Puerta muy grande: necesidad/dependencia de los demás, no se percibe lo suficientemente capaz. También extrema generosidad o falta de previsión.
  • Puerta cerrada: introversión, protección de su intimidad. Normalmente se considerará este aspecto cuando presente cerraduras o elementos que recalquen que la puerta no está abierta.
  • Puerta abierta: abierto, extravertido, gusto por relacionarse, seguridad en sí mismo, confía en el entorno. En niños pequeños es raro debido a la dificultad de dibujarlo.
  • Dos puertas: ubicadas en lados opuestos puede indicar enfrentamiento entre dos familiares percibido como posible ruptura por el niño.
  • Puerta discreta, escondida: persona selectivo, suspicaz, prudente, crítico, poca apertura hacia los demás.

 

 

Las ventanas harían las veces de “los ojos” de la casa, pues mirando por ellas se ve el exterior. También desde fuera pueden vernos. Indican aspectos parecidos a los tratados en la puerta, contacto con el exterior, relaciones sociales, extraversión, introversión, seguridad y confianza frente a retraimiento y reserva, etc.

  • Sin ventanas: sobreprotegido por los padres o familiares, se siente incapaz de tratar con el exterior, se siente preso de su entorno, carencias afectivas, si las ventanas presentan rejas o cruces malos sentimientos hacia la casa.
  • Grandes o abiertas: contacto con el exterior, apertura, libre de miedos frente a las valoraciones de los otros, curiosidad, necesidad por aprender, observador.
  • Pequeñas y/o cerradas: protección frente a los demás, introversión, no quiere ser el centro de valoraciones o atención de los demás, prudencia en las relaciones, más significativas en adultos o adolescentes.
  • Muy adornadas: tiestos, cortinas, pegatinas, contraventanas, indican persona detallista, sensibilidad, gusto por el ambiente casero, sentido estético, deseo de causar buenas impresiones, buen nivel intelectual.
  • Simples: poco interés por las relaciones sociales, relaciones fundamentadas en el interés inmediato.
  • Mal alineadas: falta de control de los impulsos, poca atención, inseguridad, baja motivación, posibles problemas de organización, la forma de desarrollar las relaciones sociales no es adaptativa.

 

El techo:

 

Siguiendo el simbolismo espacial, el techo se sitúa en la parte superior, es decir, el mundo de las ideas, de lo espiritual, de las metas…

  • Simple a dos aguas: es el más común en los niños, si no presenta alteraciones extrañas perfil realista.
  • Excesivamente grande: sobrepasa notablemente los laterales de la casa o mucha altura, excesivo idealismo soñador.
  • Sin techo, mal conectado o mal definido: carencia de creatividad o fantasía, bajo nivel cognitivo?, trastornos del aprendizaje, posible retraso mental.
  • Con buhardilla: imaginación, fantasía, raro antes de los 10-11 años.
  • Con tejas o muy elaborado: creativa, racional, idealista, gusto por el pensamiento, más elaborado mas intensos son estos atributos, infrecuente antes de los 11-12 años.
  • Plano o muy ancho: problemas familiares, excesiva exigencia por parte de sus padres, rasgo no adaptativo.

 

Las paredes:

 

Las paredes forman los límites de la casa, al mismo tiempo la sustentan, son claves para la existencia de la casa. Representan la fortaleza del yo. No existe mucha investigación en este aspecto.

  • Paredes altas: necesidad de expandirse, de crecer. Fuerza, agresividad, sobrealzamiento sobre los demás. Junto ausencia de ventanas indica egoísmo, ambición.Añadiendo estrechez del edificio, límites mal definidos, incertidumbre, fragilidad, carencias afectivas?
  • Paredes bajas: introversión, opresión, retraido, ansiedad, malestar. Potenciados en ausencia de ventanas.
  • Paredes rotas: problemas familiares importantes.

 

La chimenea:

 

Representan la calidez del hogar familiar, la protección de la familia, afecto, dejarse querer…Elemento tradicional que sin estar presente en las casa urbanas sigue siendo muy frecuente encontrarlo en los dibujos.

  • Sin chimenea: niño poco afectuoso, temperamento frío, distante, entorno familiar escaso de afecto.
  • Sin humo: presencia de chimenea pero no sale humo, falta de comunicación familiar, sufrimiento emocional.
  • Con humo: suele aparecer a partir de los 7-8 años, buen signo, calidez de relaciones, buen ambiente familiar.
  • Dirección del humo: si sube verticalmente, idealista, gusto por el mundo de las ideas y pensamiento; dirigido hacia la izquierda, añoranza, enfocado al pasado, tradicional, conservador; humo hacia la derecha, signo de extraversión, propenso a los demás, a las relaciones sociales, sin miedo al futuro y a nuevas situaciones.
  • Humo muy denso: tensión en el ámbito familiar o personal, inconscientemente pretender liberarse de toda esa carga .

 

  • El jardín: signo positivo, si el tamaño, forma, estructura no presentan alteraciones, si no hay exceso de muros y vallas. Teniendo en cuenta más detalles como árboles, flores, adornos podemos interpretarlos siguiendo el modelo que hasta ahora hemos descrito.
  • El camino: el camino representa aspectos parecidos a las ventanas y la puerta al ser una extensión de esta, relacionado con el mundo exterior, calidad de las relaciones sociales, con la manera de enfrentarse al exterior.
    • Camino recto hacia abajo: sabe escuchar, sujeto abierto, acepta los consejos de los mayores.
    • Camino ondulado:  sujeto más exigente, orgulloso, impone sus soluciones frente a las de los demás, curioso, detallista.
    • Camino bifurcado: personas abiertas, comunicativas, a la vez prudentes, cierto temor a decidir por la posible decepción provocada en familiares,
    • Camino con piedras: obstáculos y problemas encontrados al relacionarse con el exterior
  • Animales, clima: los animales pequeños representan personas que se preocupan por los otros, niños con relaciones afectuosas – más frecuente en niñas- Pájaros y mariposas, deseo de sentirse libre, liberarse de lo cotidiano. El sol, algunos lo interpretan como la figura paterna, cuando se dibuja el niño estaría reclamando su presencia. Fenómenos meteorológicos adversos, temores, miedos frente a determinadas posibles situaciones.
  • Cables, antenas TV: raro en niños pequeños, sujeto perfeccionista, detallista, obsesivo, cabezota, gusto por la rutina y los planes establecidos, capacidad de observación, buen nivel cognitivo.

TEST ARBOL

- Forma de aplicación

Puede aplicarse a cualquier edad, si bien, en el caso de los niños más pequeños, es a partir de los 5 o 6 años, coincidiendo con la consolidación de las habilidades básicas de dibujo, cuando adquiere mayor relevancia ya que es cuando el árbol aparece con todos sus elementos.

Necesitaremos papel en blanco, lápiz, goma de borrar y podemos también incorporar lápices de colores. 

Se invita al niño a que efectúe el dibujo de un árbol cualquiera, el que él desee y se le da la posibilidad de colorearlo si quiere. No hay que darle ninguna idea acerca de cómo debe ser el árbol. El niño debe plasmarlo sin ninguna influencia externa. Si efectúa alguna pregunta o tiene dudas insistir en las instrucciones: “Puedes dibujar el que tu quieras y como desees”. 

No existe límite de tiempo para su ejecución.

3- Elementos nucleares de análisis

a) Raíz y suelo
Las raíces representan un elemento de vital importancia. Tienen la doble función de proveer de alimento y energía al árbol a la vez que le sirven de firme sostén adentrándose en las entrañas de la tierra. Constituyen también el elemento oculto. La transición entre las emociones más intimas y el mundo exterior.

La raíz suele asociarse a la parte más instintiva, de sentimientos más primarios, correspondería a lo que Freud denominó “Ello”.

El suelo constituye el principio de contacto con la realidad. Es el punto desde el que el tronco emerge para sobrevivir en el medio externo.

A partir de los 9 o 10 años (antes suele ser omitido) el trazo de un suelo firme puede asociarse a firmeza, seguridad, convicción en las ideas propias. Contrariamente, cuando el suelo no está presente significaría, inestabilidad, inseguridad, dudas, falta de arraigo, necesidad de encontrar su propio espacio. 

Unas raices proporcionadas y bien dispuestas en la base del tronco suponen seguridad, buen contacto emocional con la familia. El niño se siente querido. Cuando se omiten (a partir 8 o 9 años aprox.) y en función del tamaño del tronco, pueden señalar fragilidad, temor, miedo al mundo externo. 

b) Tronco
Es el elemento más identificado con el “Yo”. En él han de plasmarse la percepción que uno tiene de sí mismo y también el grado de seguridad o confianza que se tiene para afrontar los retos del mundo externo. Los troncos débiles, estrechos, irregulares, bajos o deformes muestran un carácter débil, influenciable, que afronta con temor un mundo externo que es asumido como hostil. Por tanto, el tronco débil puede ser un indicador de problemas emocionales. 


Muchos niños con grandes carencias afectivas o que han sido objeto de maltratos, suelen pintar un tronco con un agujero en medio para simbolizar inconscientemente su vacío emocional 

c) Las ramas y la copa
Las ramas, las hojas y demás elementos de la parte superior del árbol constituyen las estructuras que se alzan sobre el tronco (sobre el “Yo”) y revelan la calidad e intensidad de las relaciones hacia el mundo exterior. Puede interpretarse como símbolo de los brazos y de la dirección de las aspiraciones. También del estado de ánimo actual.

Según su forma nos describirán a una persona que se adapta al exterior, se comunica eficazmente con los otros o, por el contrario, adopta una posición de retraimiento y defensa de su propio ego ante las amenazas externas. 

En algunos dibujos (en especial, la de los niños más pequeños) las ramas pueden ser sustituidas por la copa. En otros aparecen conjuntamente. La copa, según algunos autores (Mauricio Xandró en Tests Gráficos), se relaciona con el autoconcepto y el mundo de las ideas. En este elemento se reflejarían además posibles conflictos actuales.

4- Aspectos previos a considerar

Conviene que tengamos claros una serie de conceptos antes de intentar descifrar los signos que nos desvela el Test del Árbol.

1º- La interpretación de un dibujo debería basarse en aproximaciones estadísticas, es decir, en que la presencia de una determinada característica del dibujo se asocia con una elevada probabilidad de presentar un rasgo de temperamento o personalidad concreto. 
No obstante, en este tipo de test cobran especial relevancia las explicaciones psicoanalíticas al identificar las diferentes partes del árbol (raices, tronco y ramas) con las estructuras freudianas del ello, yo y superyo.

Independientemente del sistema que utilicemos, hay que ser prudentes en la interpretación de estas pruebas. Los datos deben analizarse en conjunto y no tan sólo individualmente. Hemos de tener en cuenta, además, que el niño es un ser en desarrollo, en constante cambio y no siempre es fácil determinar qué piensa y por qué actúa de determinadas maneras, incluido cuando dibuja. Sin embargo, esta reflexión no debe hacernos perder de vista la gran utilidad de estas pruebas como canal comunicativo y de conexión con el mundo interior infantil.

2º- Las diferentes características del niño que podemos ir suponiendo del análisis de esta prueba, sólo tiene validez en tanto en cuanto sean complementadas con otras pruebas u observaciones. Por lo tanto, sólo nos permiten formular hipótesis de trabajo que luego debemos contrastar con otras pruebas. La peculiaridad de cada niño, de cada caso, hace muy difícil establecer el mismo significado incluso para dibujos muy parecidos. De aquí la necesidad de este tipo de pruebas sean subordinadas o complementarias de otras más objetivas.

3º- Las interpretaciones del dibujo deberán tener en cuenta la edad del niño. Una misma característica puede tener diferentes significados según la edad.

Dicho esto, en el siguiente cuadro se exponen las diferentes grafías y su posible significado psicológico.

 

5- CLAVES PARA INTERPRETAR EL TEST DEL ÁRBOL

 

A) Tamaño del árbol y ubicación en el papel

Características:Interpretación:
Árbol pequeñoUn árbol pequeño (que ocupa menos de 1/4 de la hoja) se asocia a timidez, retraimiento, temor a lo externo, introversión. También puede indicar fragilidad emocional.
Árbol grandeÁrbol que ocupa toda la hoja, muestra a una persona normalmente extrovertida, alegre, que no duda en explorar todo el entorno. Probablemente disfruta de la compañia de otros. No obstante, si el dibujo grande muestra un árbol deforme o irreal  puede indicar (según la forma), excentricidad, ganas de llamar la atención, baja aceptación de las normas, también agresividad (si aparecen ramas punzantes o formas rectilíneas ascendentes).
Ubicación inferiorEl árbol emplazado en la parte baja del papel, dejando mucho espacio por encima es muy habitual en niños pequeños. Si a estas edades (hasta los 8 o 9 años) además el tronco es frágil puede significar necesidad de seguridad, temores hacia el mundo exterior, dependencia de las figuras de apego. En adolescentes se interpreta como inseguridad, conflicto entre la necesidad de protección parental y autonomía personal.
Ubicación centradaUn árbol situado en la mitad del papel suele ser interpretado como necesidad de sentirse el centro de atención de los demás, pero también (según tamaño y forma del árbol), sensibilidad, capacidad de planificación, meticulosidad, sentido práctico.
Ubicación superiorEstá en esta ubicación cuando se deja mucho espacio entre la base del árbol y el margen inferior del papel (independientemente si esta en posición horizontal o vertical). Dependiendo también de su tamaño y forma, la ubicación superior se asocia a imaginación, al gusto por el mundo de las ideas, a personas soñadoras. En todo caso, preponderancia del idealismo frente a lo material o terrenal. Preferencia por el mundo de la literatura y la filosofía.
Ocupando todo el espacioEntusiasmo, generosidad, extraversión, sociabilidad. El dibujante explora todo el espacio sin temores. No obstante, en combinación con árboles deformes, irreales, con ramas con puntas u otros detalles, suelen señalar a menudo, presencia de agresividad, falta de control (especialmente si hay sombreados muy enérgicos).

B) Las Raices

Características:Interpretación:
Muchas raicesUn árbol con muchas raices (en especial si son proporcionadas) se asocia a un fuerte apego positivo del niño con su madre y/o familia Se han establecido unos buenos cimientos para desarrollar una personalidad afectivamente sana. Seguridad hacia el futuro.
Raices deformesSi las raices son desproporcionadas respecto al tronco pueden ser síntomas de búsqueda angustiosa de estabilidad emocional; también de curiosidad por lo oculto y predominio de conductas primarias.
Ausencia de raicesLa carencia de raices en el dibujo (a partir de los 8/9 años) puede ser síntoma de falta de seguridad en el terreno emocional (especialmente si tampoco se ha pintado el suelo).
  

C) El Suelo

Características:Interpretación:
 Hasta los 9/10 años, el suelo suele omitirse y se utiliza el propio margen de la hoja. A partir de esa edad, el suelo es la expresión inconsciente del nivel de contacto con la realidad y la forma con la que se afrontan los problemas de la vida.
Suelo FirmeEl suelo firme, bien trazado y en forma de una o varias rectas, supone capacidad para ver la realidad, claridad de ideas, voluntad de crecer, estabilidad.
Suelo OnduladoIndican adaptabilidad al medio, evitación de enfrentamientos, persona probablemente sensible. Cuando el suelo se dibuja con formas en zig-zag muestran una mezcla de entusiasmo, necesidad de emprender, pero tambien, cierta agresividad.
Suelo cortoSi el suelo se limita a una simple línea corta y limitada (no mucho más grande que la base del tronco) o ésta es cortada de repente por otros elementos (piedras, jardinera, casa, etc...) muestra introversión.
Suelo en forma de cercoSi adquiere forma circular alrededor del árbol muestra aislamiento, deseo de ocultar.
Sobre montículoOrgullo, narcisismo, deseo de alejamiento de los demás. Si hay trazos en forma de punta (pinchos): actitud rebelde, de protesta, descontento por la situación personal.
SombreadoObjetividad, sentido práctico y tendencia instintiva. Cuando está demasiado resaltado: búsqueda de placer.
Ausencia de sueloEstaría relacionada con inseguridad, fragilidad o desesperanza.

D) El Tronco

Características:Interpretación:
a) Según el trazo:Tronco recto: Rigidez, autocontrol, disciplina, reservado. Tronco con líneas onduladas: Flexibilidad, sociabilidad. Carcater dócil. Si las líneas son muy retorcidas puede significar sufrimiento emocional, sentimientos de culpabilidad, ansiedad.
b) Altura:Tronco bajo: Caracter internalizante, precaución ante el mundo exterior, senzillez, modestia, acomodación, poco espíritu de superación. Tronco alto (largo): Inquietud por proyectarse hacia el exterior, para crecer, extroversión, ambición e idealismo.
c) Ancho:Tronco con ancho proporcionado (según el resto del árbol): Equilibrio, templanza, seguridad en sí mismo, autocontrol, capacidad de planificación. Tronco delgado: Inestabilidad (en especial si el troco es una sola línea), debilidad, inseguridad, timidez, retraimiento, poca iniciativa, pensamiento rígido, debilidad mental (según edad). Tronco grueso: Firmezaextraversión, autoridad, energía, seguridad en uno mismo. Si es muy grueso puede ser síntoma de rasgos negativos relacionados con la exaltación del propio "Yo" (narcisismo, autoritarismo, agresividad, individualismo, terquedad, obstinación). Tronco más grueso arriba: Se relaciona con personas idealistas, espirituales, con gran capacidad de concentración. Tronco más grueso abajo: Caracter tranquilo, materialista. Tronco ensanchado en el medio: Expresión de posible pérdida de control, impulsividad. Tronco estrechado en el medio: Inhibición, posibles represiones.
d) Inclinación:Hacia la derecha: Se relaciona con patrones extrovertidos, sociables, pero también (según sea el dibujo) con impulsividad y poca reflexión. Hacia la izquierda: Introversión, cerramiento, conservadurismo, rutinario, rechazo de lo novedoso.
e) Forma:Tronco de una pieza (a partir de los 11/12 años): se relaciona a falta de sensibilidad, de empatía, inseguridad, infantilismo, funcionamiento primitivo. Tronco abierto en la base: Impulsividad, inestabilidad emocional, también (según tipo de dibujo) agresividad. Tronco en forma angulosa: Caracter irritable, poco paciente, susceptible, fácil enfado.
f) Otros elementos:Sombreado: Depende de cómo se efectue puede estar relacionado con sensibilidad artística o, cuando se ha sombreado totalmente quedando el tronco negro, con posibles sentimientos de culpa o remordimientos internos. Agujero en el centro : en jóvenes representa a menudo, vacio interior, fragilidad emocional, problemas personales de tipo afectivo (según edad con padres o parejas). Heridas, manchas (ver árbol inicio de esta página)Cuando en el tronco aparecen manchas que el niño describe como heridas fruto de enfermedad o accidentes en el árbol, puede estar proyectando sufrimiento interno (probablemente de tipo emocional), carencias afectivas y también temores hacia el futuro. Hay que valorar también la posibilidad de malos tratos físicos o psíquicos.
  

E) Las Ramas y la Copa

Características:Interpretación:
Ramas hacia arribaEn general se asocia a optimismo y extraversión. También con el plano de las ideas y las aspiraciones. Unas ramas ascendentes que se proyectan hacia el cielo pueden ser muestra de ansias de crecer, de interactuar con el mundo. No obstante, si las ramas acaban en forma de punta o muestran dientes de sierra pueden señalar impulsividad, agresividad, el entorno externo es visto como hostil y hay que defenderse
Ramas hacia abajoLas ramas caidas tienen un primer significado como expresión de un estado decaido, pesimista, de desamparo o desasosiego. Sin embargo, cuando son dibujadas con cierto refinamiento y detalle (tipo sauce llorón) pueden estar asociadas a personas refinadas, detallistas, muy sensibles y con tendencia a la tristeza.
Ramas ascendentes y descendentes simultaneamentePersona influenciable, con poco criterio, inestable, sumisa. Se considera muestra de la presencia simultánea de euforia y desaliento que debe interpretarse según las otras claves. Si las ramas se cruzan con predominio de formas angulosas: impulsividad, tendencia a la crítica ajena, baja tolerancia a la frustración, conductas externalizantes.
Ramas y ramificaciones delgadasDependiendo de la edad: sencillez, sensibilidad. Si son extremadamente finas: cerramiento afectivo, timidez (especialmente si no hay hojas).
Ramas y ramificaciones gruesasSi son proporcionadas al árbol y bien dibujadas: seguridad, confianza en el futuro, ideas claras, constancia. Si se bifurcan: se relacionan con buenas capacidades imaginativas y plásticas (siempre que se efectue dentro de un dibujo proporcionado en sus diferentes elementos).
Ramas abiertasExtraversión, tendencia a analizar el entorno con iniciativa. También (según forma del trazo) impulsividad.
Ramas cerradasEn general, introversión, cerramiento, necesidad de auto-protección frente al mundo exterior.
Ramas cortadasDebe interpretarse dentro del dibujo en su conjunto ya que puede tener distintos significados. A menudo se asocia a: baja auto-estima, complejo de inferioridad, problemas de relación afectiva, pero también a terquedad u obstinación.
Ramas que surgen del troncoSuelen estar presentes en los dibujos efectuados por adolescentes. Desde un perspectiva psicoanalísta se explica como una manifestación de la sexualidad en desarrollo. Puede también expresar la necesidad de buscar su propio camino (búsqueda de la propia identidad) a partir del "Yo" representado por el tronco.
Copa pequeña (en relación al árbol)Introversión, timidez, miedo al exterior 
Copa grande (en relación al árbol)Extraversión, imaginación, interés para relacionarse con el mundo exterior, idealismo. Si es muy grande: Difícil control de la fantasia, narcisismo, vanidad, exhibicionismo.
Copa proporcionadaEquilibrio entre introversión y extraversión, reflexividad, realismo, gusto por los detalles, equilibrio.
Copa con trazos onduladosSi son proporcionados y suaves: Adaptabilidad, paciencia, comprensión, gusto por las actividades tranquilas. Cuando las ondulaciones se presentan muy concentradas: Retraimiento, protección hacia el exterior, necesidad de mantener el propio espacio, sociabilidad muy selectiva . Si la copa aparece aplastada en su parte superior: Sentimientos de desesperanza, sumisión e indefensión ante la presión del mundo externo.
Copa en forma angulosaSegún el trazo exacto: Introversión, terquedad, tendencia a la polémica, impulsividad.
  

F) Otros Elementos

Elemento:Interpretación:
FollajeNo suele encontrarse en los niños más pequeños e incluso en adultos. Su presencia, según la edad, puede indicar, buen nivel de inteligencia, capacidad de concentración, gusto por los detalles, aptitudes plasticas, vivacidad, deseo de actividad. También (según el dibujo) perseverancia, pensamiento obsesivo. Si el follaje es irreal, caracter caprichoso, gusto por la fantasía, desconexión con la realidad, necesidad de disimular ciertas características de su personalidad. Cuando se dibujan hojas cayendo del árbol:temperamento sensible, timidez, melancolía, inestabilidad, susceptibilidad. También (según dibujo): impulsividad, baja tolerancia a las frustraciones, dependencia emocional de los otros.
Presencia de FrutosCuando se han dibujado frutos reales (cerezas, naranjas, manzanas, etc...), simbolizan la productividad, las ganas de madurar, el deseo de dar y hacer felices a los demás (ver árbol 4). En general se asocia a personas muy sociables, altruistas, generosas y trabajadoras. En adolescentes también se relaciona con la necesidad de mostrar las propias capacidades y la búsqueda de resultados inmediatos. Si los frutos se dibujan en el suelo: sentimientos de decepción, añoranza, inquietud, temor, agitación emocional.
Pequeños animales, Sol y otrosDeben interpretarse dentro del dibujo en su conjunto. Los pequeños animales suelen pintarlos niños con buen soporte afectivo, preocupados por los sentimientos y cuidados hacia los otros (están más presentes en los dibujos de las niñas). El sol algunos autores lo entienden como el símbolo del padre. Cuando aparece en el dibujo significaría que se reclama su presencia para que se ocupe de forma más activa del árbol (que representa el "Yo").
  

Ejemplos Test Árbol

Breve interpretación de cada arbol:

Arbol 1:
Niña de 8 años. Tronco firme con la base inestable y subrallada. La copa es pequeña con formas onduladas. 

INTERPRETACIÓN: Carácter fuerte pero que ve con recelo el mundo externo, introversión, poca capacidad para relacionarse con el exterior. El subrallado en la base del tronco puede significar necesidad de asegurar la estabilidad emocional en su entorno familiar como paso previo para crecer.

Arbol 2:
Niño de 11 años. Dibujo grande del que destaca una gran copa con formas onduladas y ligeramente inclinada hacia la derecha. 

INTERPRETACIÓN: Temperamento extravertido, autoestima elevada, pero también, narcisismo y vanidad.

Arbol 3:

Niña de 16 años. Dibujo pequeño (ocupa menos de 1/4 del papel). Destaca la pobreza de forma y el agujero en el tronco. No existen ni las raices ni el suelo. INTERPRETACIÓN: Retraimiento, carencias afectivas, vacío emocional. También déficits cognitivos o de aprendizaje. Necesidad de una evaluación más objetiva en el terreno emocional-conductual. 

Arbol 4:
Niña de 11 años con un C.I (wisc-r)= 135. Árbol grande bien proporcionado. Se han dibujado las raices, el suelo y una copa con frutos. 

INTERPRETACIÓN: Temperamento abierto, social, con buenos vínculos afectivos con la familia que le dan seguridad para proyectarse en el mundo externo. Los frutos indican buenos sentimientos, generosidad, empatía con los semejantes y deseos de compartir. 

Arbol 5:
Niño 12 años. Arbol grande, formas exageradas, irreal. Raices y tronco bien definidos. INTERPRETACIÓN: Personalidad fuerte y obstinada. Dificultad para seguir las normas. Las ramas en forma de lanza son un mecanismo defensivo contra los elementos hostiles del exterior.

VALORAR EL DÍA A DÍA

Llevo meses queriendo escribir pero por unas y por otras cosas nunca me pongo, hoy es un día raro, lleno de alegría y tristezas a la vez que  tengo mi corazón.

Un revuelto de sentimientos, contenta porque gracias a dios tengo una familia maravillosa que me quiere y la quiero ante todas las cosas, estoy con objetivos a plan personal que me llenan, y tengo un trabajo que me encanta como orientadora en un  colegio y hago lo que me gusta.

Pero a veces pasan cosas en la vida que te hacen pensar… ayer por la tarde estuve en la comunidad Salesiana, el curso escolar 2016/2017  tuve la suerte de trabajar en Salesianos como orientadora(vamos hasta hace dos meses)  y la verdad que conocí personas maravillosas, compañeros geniales y puedo decir, hoy por hoy que hice grandes amigos, me fui de fin de curso con ellos, que agradecí la confianza que depositaron en mi por elegirme como compañera, y trabaje en la mano de una maravillosa persona, Santiago López Lara, Salesiano y director pedagógico del colegio, reconozco que al principio le tenía algo de temor porque me decían cosas de él y es verdad que tenía un carácter especial , duro por fuera pero blando por dentro, una persona bondadosa y con un gran corazón.

La verdad que confió en mi desde el primer momento, me dijo que trabajaba muy bien y que siempre estaba dispuesta a trabajar y ayudar, en el fin de curso pude conocerle un poco mejor, yo siempre analizo a las personas sin yo quererlo y pude ver la nobleza de su corazón y el caparazón que a veces ponía “gruñendo ¨ pero desde el cariño porque no lo hacía de mal , los niños cuando le veían le abrazaban , ya fuese en el pasillo, patio , calle , le adoraban , pero ayer Don Santiago falleció de manera repentina con 66 años y la verdad que ha sido un golpe duro, yo ya no estoy en ese cole este año, estoy en otro pero me imagino meses atrás pasando por el pasillo y ver a Don Santiago allá donde iba, en el despacho dándole los buenos días, en el patio que compartía con él, en todos los sitios , era un gran referente y me imagino ahora en vacío que deja en el colegio, por eso he querido plasmar algunas palabras para que no quede en el olvido sino reflejar que para mi aunque en un tiempo más reducido que para otras personas, pues también fue importante para mí, hace un par de meses me encontré con él y me saludo con una gran sonrisa se notaba que se alegraba de verme, y después de compartir con él palabras le dije que me marchaba y me contesto ¿ya? Y le dije pronto volveré hacerte una visita y me duele no haber ido antes porque ahora esa visita nunca podrá ser posible, por eso te das cuenta que no sabes cuándo es la última vez que te despides de alguien, queremos hacer tantas cosas que al final pequeñas cosas como es ver a alguien puede ser algo tan grande.

Por eso hay que estar con aquellas personas a las que queremos, dedicar tiempo a quien apreciamos, y valorar la vida, el estar sanos, hacernos revisiones medicas aunque nos cueste ir al médico, debemos ir , aunque puede que estemos sanos y nos pille un coche , no sabemos que nos depara el destino, pro hay que ir a por lo que queremos, luchar por aquello que nos hace felices, no pensar en que dirá la gente , porque que mas da lo que piensen voy a ser feliz hoy, porque mañana no sé si voy a estar aquí.

Y por ultimo decir que espero escribir más a menudo y que gracias a mi familia y amigos que estan en mi vida porque gracias a ellos mi vida  es mejor y soy más feliz.